Se trata de Esteban Daniel Larcosta, un correntino de 37 años que trabajaba como contramaestre en un potero. Sospechan que su deceso puede haber sido consecuencia de un accidente.
El marinero de 37 años hallado muerto este jueves a la mañana en el puerto local fue identificado como Esteban Daniel Larcosta, quien trabajaba como contramaestre en un potero.
Fuentes de la investigación confirmaron la novedad a LA CAPITAL, horas después de que se produjera el hallazgo entre las terminales 2 y 3 del sector 7. En ese marco, los mismos informantes señalaron que si bien resta que se realice la autopsia al cadáver, el fallecimiento del hombre habría sido consecuencia de un accidente, ya que no presentaba lesiones ni indicios de haber sido atacado.
“Es muy posible que se haya caído al mar y se haya ahogado”, confió un testigo del caso. De todas maneras, esa información deberá ser confirmada en los próximos días por la Justicia Federal, que tomó intervención en el operativo realizado por Prefectura para rescatar el cuerpo de Larcosta e inició una causa judicial para determinar formalmente los motivos del deceso.
El hallazgo del cadáver del hombre se produjo cerca de las 7 entre las terminales 2 y 3, sobre el sector 7, cuando flotaba en el agua cerca del muelle y los barcos atracados en ese lugar de la ciudad. Los informantes que dialogaron con este medio manifestaron es que el marinero llevaba consigo sus documentos y las credenciales con los permisos correspondientes para hallarse en esa zona portuaria.
“Llegó el aviso de que había algo parecido a un cuerpo flotando en el agua, entre las terminales 2 y 3 y Prefectura acudió con una embarcación y determinó que se trataba de un hombre fallecido”, explicó la primera fuente consultada. Y agregó que después de esa diligencia el cadáver fue preservado y trasladado a la morgue.
“No se observaron lesiones o indicios de violencia, pero el hombre estaba muy abrigado con ropa y campera, por lo que no se puede descartar que existan lesiones hasta que no se lleve a cabo la autopsia”, añadió el informante.